Perera, el torero comprometido

En la línea de lo que es habitual en él, Miguel Ángel Perera se implica de nuevo en un proyecto social que persigue, en este caso, la mejor calidad de vida posible para jóvenes con habilidades especiales y enfermedades raras. Se trata de la Fundación Laberinto, una entidad que se acaba de crear en Huelva con el objetivo de construir, poner en marcha y mantener un centro polivalente donde estos jóvenes reciban atención, no sólo médica, sino también educativa y de ocio, entre otros muchos ámbitos. Perera es uno de los patronos de esta nueva fundación, a la que se unen también notables profesionales onubenses de diferentes disciplinas como el Derecho, la notaría o la arquitectura.

  

Una vez construido, el Centro Polivalente Palante-Popal, que así será su nombre, ofrecerá atención a esos niños y jóvenes de diferentes edades que padecen enfermedades raras y "que ven cómo no hay recursos para ellos a la hora de complementar su crecimiento, su formación y su educación con actividades extraescolares o que, al cumplir los 21 años y finalizar el proceso de escolarización, tienen que quedarse ya en casa cuidados por su padres y sin que nadie les ofrezcan terapias ocupacionales que llenen su tiempo y enriquezcan sus vidas", explicó Pilar Pereda, presidenta de la Fundación Laberinto. Desde esta entidad se establecido ya una relación de colaboración con la Junta de Andalucía y se está a la espera de abrir conversaciones con el Ayuntamiento de Huelva para la cesión de suelo dotacional donde empezar a construir el futuro edificio.

 

En la presentación de la propia fundación y de su proyecto, Miguel Ángel Perera destacó que "no estoy aquí sólo como torero y como representente de un mundo que siempre ha sido muy generoso, sino, sobre todo, como persona y como padre. Conozco a familias que tienen en su seno a jóvenes con un enfermedad rara y sé muy bien de sus desvelos y de cómo eso les cambia la vida. Son padres y madres coraje de personitas muy especiales. Unos y otros necesitan de nuestro reconocimiento, de nuestro cariño y de nuestra implicación para que este centro polivalente se haga pronto realidad. Muchos pasos juntos acortan el camino. Con mis pasos cuentan desde ya y para siempre"

 

20161004-laberinto10.jpg 20161004-laberinto11.jpg 20161004-laberinto12.jpg 20161004-laberinto13.jpg

 

Perera, el torero comprometido

En la línea de lo que es habitual en él, Miguel Ángel Perera se implica de nuevo en un proyecto social que persigue, en este caso, la mejor calidad de vida posible para jóvenes con habilidades especiales y enfermedades raras. Se trata de la Fundación Laberinto, una entidad que se acaba de crear en Huelva con el objetivo de construir, poner en marcha y mantener un centro polivalente donde estos jóvenes reciban atención, no sólo médica, sino también educativa y de ocio, entre otros muchos ámbitos. Perera es uno de los patronos de esta nueva fundación, a la que se unen también notables profesionales onubenses de diferentes disciplinas como el Derecho, la notaría o la arquitectura.

  

Una vez construido, el Centro Polivalente Palante-Popal, que así será su nombre, ofrecerá atención a esos niños y jóvenes de diferentes edades que padecen enfermedades raras y "que ven cómo no hay recursos para ellos a la hora de complementar su crecimiento, su formación y su educación con actividades extraescolares o que, al cumplir los 21 años y finalizar el proceso de escolarización, tienen que quedarse ya en casa cuidados por su padres y sin que nadie les ofrezcan terapias ocupacionales que llenen su tiempo y enriquezcan sus vidas", explicó Pilar Pereda, presidenta de la Fundación Laberinto. Desde esta entidad se establecido ya una relación de colaboración con la Junta de Andalucía y se está a la espera de abrir conversaciones con el Ayuntamiento de Huelva para la cesión de suelo dotacional donde empezar a construir el futuro edificio.

 

En la presentación de la propia fundación y de su proyecto, Miguel Ángel Perera destacó que "no estoy aquí sólo como torero y como representente de un mundo que siempre ha sido muy generoso, sino, sobre todo, como persona y como padre. Conozco a familias que tienen en su seno a jóvenes con un enfermedad rara y sé muy bien de sus desvelos y de cómo eso les cambia la vida. Son padres y madres coraje de personitas muy especiales. Unos y otros necesitan de nuestro reconocimiento, de nuestro cariño y de nuestra implicación para que este centro polivalente se haga pronto realidad. Muchos pasos juntos acortan el camino. Con mis pasos cuentan desde ya y para siempre"

 

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