9 de julio de 2016
ARÉVALO
Feria DE SAN VICTORINO
CORRIDA DE TOROS 6 TOROS de
GARCIGRANDE y DOMINGO HERNÁNDEZ
Julián López, El Juli
MIGUEL ÁNGEL PERERA
Roca Rey
VA POR TI, VÍCTOR...
Es muy dificil hablar del toreo aun cuando éste se manifiesta en toda su verdad, la más cruda y la más dura, la única verdad, la verdad por excelencia, con mayúsculas, al desnudo. Es prácticamente imposible valorar lo que pasó en una tarde de toros que, inevitablemente, ha estado marcado por la muerte de un torero en otra plaza. La noticia fue calando poco a poco, fría, sorprendente, difícil de creer, clavándose lenta como un cuchillo. Y a partir de su confirmación, ya todo dio igual. Siguió la tarde, siguió el toreo -lo que engrandece a los toreros que tuvieron que seguir adelante en medio de tanto dolor-, pero ya casi nada importaba. El dolor era demasiado grande...
Así las cosas, baste decir que Miguel Ángel Perera cortó una oreja de cada uno de sus dos oponentes, con clase los dos, aunque con más importancia el primero. Lo cuajó el extremeño a placer en un despliegue total del concepto pererista, ése que se erige sobre el pilar de la pureza más absoluta y que se enriquece con su actitud de entrega máxima cuando decide irse a vivir en ese terreno que dicen del toro hasta que Miguel Ángel decide hacerlo propio. Clase también tuvo el quinto y Perera cuidó y multiplicó su buen fondo en una composición tan inteligente como bella.
Con todo, el valor de la tarde entera estuvo en la capacidad de los toreros de echarla hacia adelante por respeto al público asistente aun con la conmoción, el duelo y la rabia íntima e interior por saber de la muerte de un torero, de un compañero, en la plaza. En señal de respeto y de luto se fueron los tres actuantes a pie de la plaza. No cabía otra. Como sólo cabe, Víctor, dedicarte hoy y siempre todo el recuerdo, todo el reconocimiento y toda la gloria. Ésa que, en la vida y en la muerte, está sólo reservada a los toreros.
Plaza de Toros de ARÉVALO (Ávila). Tres cuartos de entrada. Se lidian toros de GARCIGRANDE y DOMINGO HERNÁNDEZ.
Julián López, El Juli: ovación y dos orejas
Miguel Ángel Perera: oreja y oreja
Roca Rey: dos orejas y dos orejas
Asiste a la corrida desde una barrera la Infanta Elena de Borbón, a quien Miguel Ángel Perera brinda su primer toro.