bilbaos13 203
23 de abril de 2011
TEXCOCO (MÉXICO)
Feria INTERNACIONAL DEL CABALLO
 
CORRIDA DE TOROS 6 TOROS de
FERNANDO DE LA MORA
Ignacio Garibay
MIGUEL ÁNGEL PERERA
Octavio García, El Payo
 
MIGUEL ANGEL PERERA CORTA UNA OREJA EN LA SEGUNDA CORRIDA
 

Una oreja ha sido el balance de Miguel Ángel Perera en su segunda tarde en la feria mexicana de Texcoco, donde la corrida de Fernando de la Mora no dio el juego apetecido al resultar floja.

Su primer toro le permitió poco lucimiento con el capote, aunque el torero lo intentó. Perera cuidó al toro sin forzarle, toreándolo a media altura, torerando con mucha suavidad e imprimiendo mucho empaque a cada uno de los derechazos. Al natural toreó aún mejor, haciendo crecer el tono de la faena. Fue un conjunto de mérito y de talento que remató de estocada, concediéndole el juez de plaza una oreja.

El quinto no transmitió nada y además molestó mucho el viento tanto con el capote como con la muleta. La faena no pudo remontar vuelo porque el toro ponía sosería extrema a todo lo que el torero quería hacerle. En esta ocasión no estuvo fino con los aceros. Pese a ello, el público le aplaudió.

  

Plaza de Toros Silverio Pérez, cuarta corrida de Feria. Dos tercios. Se lidiaron toros de Fernando de la Mora, de escaso juego.

Ignacio Garibay, silencio y al tercio.

Miguel Ángel Perera, oreja y aplausos con dos avisos.

Octavio García El Payo, aplausos con un aviso y oreja

 
 
 

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23 de abril de 2011
TEXCOCO (MÉXICO)
Feria INTERNACIONAL DEL CABALLO
 
CORRIDA DE TOROS 6 TOROS de
FERNANDO DE LA MORA
Ignacio Garibay
MIGUEL ÁNGEL PERERA
Octavio García, El Payo
 
MIGUEL ANGEL PERERA CORTA UNA OREJA EN LA SEGUNDA CORRIDA
 

Una oreja ha sido el balance de Miguel Ángel Perera en su segunda tarde en la feria mexicana de Texcoco, donde la corrida de Fernando de la Mora no dio el juego apetecido al resultar floja.

Su primer toro le permitió poco lucimiento con el capote, aunque el torero lo intentó. Perera cuidó al toro sin forzarle, toreándolo a media altura, torerando con mucha suavidad e imprimiendo mucho empaque a cada uno de los derechazos. Al natural toreó aún mejor, haciendo crecer el tono de la faena. Fue un conjunto de mérito y de talento que remató de estocada, concediéndole el juez de plaza una oreja.

El quinto no transmitió nada y además molestó mucho el viento tanto con el capote como con la muleta. La faena no pudo remontar vuelo porque el toro ponía sosería extrema a todo lo que el torero quería hacerle. En esta ocasión no estuvo fino con los aceros. Pese a ello, el público le aplaudió.

  

Plaza de Toros Silverio Pérez, cuarta corrida de Feria. Dos tercios. Se lidiaron toros de Fernando de la Mora, de escaso juego.

Ignacio Garibay, silencio y al tercio.

Miguel Ángel Perera, oreja y aplausos con dos avisos.

Octavio García El Payo, aplausos con un aviso y oreja

 
 
 
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